Es imposible entender lo que han hecho los socialistas para establecer la ley de amnistía -cuando digo socialistas me refiero a la cúpula a la que va a buenos RESTAURANTES de muchos tenedores y también frecuentan prostíbulos de lujo, cuando desean desahogarse-.
Estos son los que nos están arruinando nuestra España, que si Dios no lo remedia, ya que hay muy pocas posibilidades de que sean nuestros políticos los que puedan hacerlo, el que España continúe en el régimen democrático del 78.
Otra esperanza es que la Unión Europea intervenga, y lo haga a tiempo, de tal manera que el bodrio de ley de amnistía se publique en el BOE que sería un conflicto permanente ya que ningún jurista en activo podría en conciencia aplicarla ya que en el caso de hacerlo lo harían prevaricando.
El criterio de la inmensa mayoría de juristas tanto en activo como en las instituciones, consideran la ley de amnistía que no es una ley para mejorar a todas las personas que habitamos en nuestra España sino que se ha hecho para un grupo de condenados y sobre todo a un fugado de la justicia que se pasea por Europa como Pedro por su casa.
Pero el quid de esta cuestión, es que este delincuente tiene la enorme cantidad de siete votos, pero estos siete votos deben ser de un material tan preciado que su valor es incalculable y es este delincuente, catalán, por más señas, el que pone el precio a su joya de esos siete invalorables votos.
Pero como hay gente “pa tó”, como dijo el TORERO, pues efectivamente le salió un comprador que le compró los siete votos y el precio que pagó este desgraciado ha sido contante y sonante: la democracia del 78 siendo ésta nuestro valor más PRECIADO.
Todas las instituciones del Estado se han pronunciado en contra de esa bochornosa ley, pero hay dos que no lo han hecho, y no digo ya pronunciamiento, sino que, ni tan siquiera el más mínimo comentario.
ESAS DOS INSTITUCIONES SON: LA CORONA Y EL EJÉRCITO