LAS MIL Y UNA REFLEXIONES PARTE XVII

370) Casi siempre la ambigüedad es calculada diciendo una cosa y la contraria; se llega a la confusión, que es el objetivo del ambiguo.

371) La filosofía es una ciencia imprescindible para encontrar nuestra forma de ser y nuestro comportamiento racional.

372) La lectura nos ayuda a ver con la mente las cosas que existen de una manera real y comprenderlas según nos las explican.

373) De una persona aprovechada y sin escrúpulos puedes esperar todo lo peor, hasta utilizar un cuerpo presente para sus propios fines.

374) Tampoco se puede esperar nada bueno ni nada respetable de un ser amoral.

375) Cuando tratas de aparentar lo que no se es, posiblemente tú solo te evidencies.

376) Cuando se anuncia algo bueno y positivo, notas en quién da la noticia, un grado de bienestar y satisfacción al cual nos sumamos.

377) El ser apático es muy preocupante, ya que su apatía puede alcanzar por contagio.

378) Las bagatelas son a veces tan importantes, que las luchas son encarnizadas por lograrlas.

379) La política no tiene límites, ya que estando en tu propia casa suena el teléfono, y el político de turno te pide el voto para su partido.

380) Cuando se aprecia de verdad, es cuando se ofrece la ayuda sin pedir nada a cambio.

381) La demagogia ciega la razón, esto es lo que los demagogos que están en contra de la unión europea pretenden, y para que esto no ocurra hay que armarse con la razón, la justicia y sobre todo con los recuerdos recientes, que sirvan para refrescar la memoria a todos estos demagogos olvidadizos.

382) El pensar nos distingue.

383) ¿Para cuando la solución de la llamada violencia de género? Es que con etiquetarla es suficiente, sin tener en cuenta las muchas mujeres que dejan esta vida.

384) El estilo va unido al bien vestir, pero hay otros estilos que no son tan vanidosos, y ayudan a hacer feliz a los más necesitados.

385) Ante una actitud arrogante, lo mejor es comportarte lo más sencillo posible, hasta que se caiga del guindo y de con sus pies en la tierra.

386) La astucia a priori no se puede calificar de buena o mala, depende para que se utiliza.

387) Hay que comprender a los ateos, pues somos nosotros los creyentes, los que tenemos muchas dudas, pero aun así nos compensa creer y agarrarnos a la esperanza.

388) Avaricia y austeridad, dos actitudes completamente dispares, una es depreciable la otra es recta y justa.

389) Muchas circunstancias baladíes, pueden solucionar una situación difícil que tenga o pueda tener alguna persona.

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