Canto a la sensibilidad
Que está en las personas
Pero en algunos no se da
Es de las virtudes más nobles
Una aclamada verdad
La usan los caballeros
Las damas de natural
Los humildes por mandato
Que tiene que respetar
No se entiende que haya personas
Que la quieran humillar
Pero hay gentes retorcidas
Que todo le importa “na”
Para llegar a ser justo
Por ella se ha de pasar
No hay camino que no sea
Respetar y hacerse respetar.
Por casualidades de la vida (aunque yo soy más de creer en los planes del de arriba), hoy al salir de clase al mediodía he tenido la suerte de toparme con usted y que me regalase un poema. Usted no lo sabía, pero ha sido una semana un poco cuesta arriba, y ha conseguido que me vuelva a dar cuenta de lo que de verdad importa en la vida: encontrar la felicidad y la alegria en las pequeñas cosas de cada día. No deje de escribir, es maravilloso lo que hace. Tan solo quería decirle que ya tiene una nueva «follower». Un placer conocerle.
Te doy las gracias María,
Porque también personas como usted hacen mucho bien,
en este caso a mi persona