Situación real de España en estos momentos, es decir, a finales del 1982
Sus reservas son débiles. Su deuda exterior es alta. Su balanza de pagos es deficitaria. Su mercado exterior no es sólido. Su tecnología no es de punta y por lo tanto no puede incidir en que se produzca más y mejor, y por ello no está en condiciones de competir.
Con todas estas puntualizaciones es evidente que no trato de descubrir nada nuevo, es una situación de hecho que está ahí. Pero a mí no me gustaría terminar esta frase con el típico y tópico: “y es inamovible”, ya que esta situación sí es movible.
Antes de continuar, he de reseñar que esta situación del país es a finales de 1982. Una vez aclarado esto y sin entrar en ningún análisis retrospectivo, pues sería muy largo y muy triste, continúo con mi aportación, que desde un criterio no lo suficientemente académico, sí podría decir ser el de una persona que se ha movido y se mueve en el campo de la empresa y que no ha tenido más remedio que estar constantemente imaginando, y si de algo podría estar, si no orgulloso, sí satisfecho, es de haber podido desarrollar parte de su imaginación. Esta última palabra es muy importante, porque es la base o pedestal donde debiera apoyarse la actividad humana.
Los criterios a aplicar como solución serían los siguientes, teniendo en cuenta que dichos criterios se van a basar en la mejor de las intenciones y puede así mismo que no estén basados en un profundo conocimiento de economía, por lo que puede que no sean viables de aplicar, pero aún siendo así, son los criterios que imagino y que voy a exponer a continuación.
En primer lugar y sin perder la urgencia del tema que nos ocupa, haría un inventario de todos y cada uno de los recursos que poseemos y también de los problemas que nos acosan. Para ello emplearía el mejor y más amplio equipo de técnicos, esto nos llevaría a tener una evaluación precisa y urgente, aunque estos dos conceptos sean un poco incompatibles. Es evidente entonces que al no tener esa evaluación y no poderla analizar y crear de orden de prioridades correspondientes, no puede aplicar ninguna solución, pero partiendo siempre de que lo que se trata es de imaginar, a partir de ahora me basaré en hipótesis. Empezaré por la primera hipótesis.
Leído. Muy bien Nicolás. Pero qué bien escribes