Malos, malísimos: así son los de enfrente, los ÓSCAR, los Puente, unidos a los López. Y, por si faltaba algo, ahí está el despeinado de PELUQUERÍA, el MINISTRO “Sr.” Bolaños que cuando habla sube el PAN.
 
Si existe el infierno, estos cuatro van de cabeza con Lucifer, que les tiene reservada una caldera particular para mentirosos y malignos. También tiene otra caldera, grande, grande como una cancha de baloncesto, para que quepan los 22 Ministros.
 
Para el estafador político que tenemos de Presidente, Lucifer le tiene reservado un JACUZZI con masajista incluida para La MONCLOA, junto a los cientos y cientos de asesores. Lucifer no tiene sitio para tantos, así que, si acaso llega a un acuerdo con don Florentino Pérez, le cederá el Bernabéu.
 
Bueno, ahora me ocuparé de los tibios y los envidiosos. Estos pobres nunca dan la cara, ya que van cargados de envidia por la salud política de sus compañeros —en este caso, su compañera, y los triunfos tanto de ella y de ellos. Lo llevan con muy poquito entusiasmo.
 
Ya alguien lo dijo: aquello de “¡Todo el mundo al suelo, que vienen los nuestros!”. También lo dijo el político ITALIANO de más raigambre de todos los tiempos: que hay contrincantes políticos a los que ves venir, y compañeros de partido que son los que se acercan sin que los veas venir.
 
Y ahora, el lema… con un poquito de variante,       SABIDURÍA Y QUIÑONES.
 
ESTE ESCRITO ES MERA OPINIÓN DE LA INFORMACIÓN QUE RECIBO. Y, EN CONSECUENCIA, ES MI OPINIÓN.
 
DISTINGUIDOS Y APRECIADOS LECTORES, ES PARA MÍ UNA GRAN SATISFACCIÓN QUE ME HONREN CON SU ATENCIÓN, DE ENTRAR EN MI WEB, Y ADEMÁS RECIBIR LOS GRANDÍSIMOS COMENTARIOS QUE USTEDES ME HACEN. CON MI RECONOCIMIENTO, GRACIAS.