El dicho de que todos somos iguales pero unos más iguales que otros no vale para el virus COVID-19. Este individuo no hace ningún distingo ni ninguna diferencia, es decir lo mismo le da que sea abuelo, abuela, hijo, hija, nieto o nieta, alto, alta, bajo, baja, guapo, guapa, feo, fea, gordo, gorda, rico, rica, rubio, rubia, moreno, morena, listo, lista, torpe, bondadoso, bondadosa, egoístas, fuertes, débiles, de buena o mala vida y que sirvan y que nos hagan servir, que sean de cualquier profesión y ocupación tanto las más honestas como las más deshonestas, los piadosos como los especuladores, los que trabajan, los que no lo hacen, los de distintas razas y color, los de distintas creencias y religiones, de los que presumen de lo que tienen y de los que no tienen nada, de los que se les ríe la gracia, de los que manejan a las gentes como el perrete del pastor, del proxeneta, el traficante de armas, de personas, de drogas, de animales, de todo aquello que sirva para especular y ganar dinero fácil a costa del sufrimiento de los demás. Criminales, canallas, malvados, embusteros, hipócritas, violadores, aprovechados, timadores, tontos que se creen listos, D. Juanes de medio pelo, divos y divas elitistas muy creídos. Los que miran por encima, los promotores de cualquier guerra y de los que no son capaces de detenerlas. Los dictadores de cualquier signo, los embaucadores, todos los salva-patrias (Si faltan algunos que me perdonen).
Si el virus se fijase en ellos sería un castigo divino el librarse de tanta escoria que padece toda la humanidad.
Pero al menos es un cierto consuelo el saber que toda esta chusma no tiene, ni poder, ni dinero suficiente, por mucho que tengan, para evitar este virus apellidado COVID-19 que no distingue, por desgracia, ni los buenos sentimientos, los cuales se están manifestando en muchísimas personas de buena voluntad.
Bueno faltan los políticos, aunque ellos están expuestos también al señorito virus. Pero claro estos señores se consideran de una pasta especial ya que como tienen el Boletín Oficial del Estado no tienen nada más que publicar una norma y ya están exentos de todo riesgo. Pero el COVID dice que no entiende de política y menos de políticos.
Esto es para que todo el mundo se dé cuenta que en determinados momentos nadie es más que nadie y aquellos que lo reconocen al menos son más positivos, porque su resignación, le ayuda en su sistema inmunológico, que es muy importante para que el virus no campe a sus anchas por nuestro cuerpo. Este virus que ha venido y nadie realmente sabe de dónde ni cómo ha sido.
Si algo positivo hay es que nos conozcamos todos y empecemos a reflexionar si merece la pena tanto sacrifico por vivir muy bien el hoy, y al mismo tiempo atar el futuro sabiendo que ese futuro no es nuestro. Confiemos en la providencia a falta de la total seguridad.