LAS MIL Y UNA REFLEXIONES PARTE XLV

860) Dependiendo de la sensibilidad que se tenga así será el grado de humanidad que entregues a los demás.

861) Todos tenemos derecho a ser buenas personas, a lo que no tenemos derecho es a ser un malvado.

862) La justicia debería reparar el daño que las personas normales sufren antes que garantizar a los malvados que los infringen.

863) Por el conocimiento se llega al aprecio y también a la estima.

864) ¿Cuántas personas hay que dan ejemplo con su comportamiento? No muchas desgraciadamente.

865) Si pierdes la dignidad es como perder la identidad, prácticamente como sufrir Alzheimer sin padecerlo.

866) Las personas celosas y envidiosas suelen manifestarlo de manera colérica.

867) La dignidad es como el capitán de un barco que es el último en abandonarlo.

868) El miedo siempre ha sido un freno a los actos violentos, ahora que hay tantos de esos actos ¿No será porque esa sensación de miedo ya no existe?

869) Antes de llegar a la confianza hay que pasar por distintas fases, pero cuando no te tienen ninguna, no puedes decir aquello de que, me tienes poca confianza.

870) Hay que llegar al aprovechamiento integral de absolutamente todo, tanto humano, como material, como también empresarial, y que sean los mejores quienes nos dirijan.

871) Una cosa es serle útil a los demás y otra bien distinta es que los demás te utilicen.

872) Las religiones han de conservar sus esencias pero han de adecuar sus mensajes al siglo XXI.

873) Primero crear y producir y después distribuir, más de lo primero, y mejor de lo segundo.

874) Lo que voy a decir está archisabido pero aún así voy a hacerlo, a los políticos y quienes los apoyan, les importa una higa sus votantes y quienes no lo son.

875) Si la justicia se basa en sus sentencias y éstas se producen al cabo de los años, que a veces son de dos dígitos. Esto tiene de justicia lo que un bajito de adonis.

876) La tranquilidad la da la paz, la fuerza y la esperanza.

877) Leer algo aunque no sea mucho y si es poesía muchísimo mejor: desarrollará tu sensibilidad que es la cualidad más noble que el ser humano puede tener.

878) A los niños hay que enseñarlos, pero también hay que estar dispuesto a recibir algunas lecciones de ellos.

879) Entre una depresión y una desesperación: de la primera se puede salir de la segunda es mucho más difícil.

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